La comunidad católica de Louisville celebró el día del Corpus Christi, recordando de esta manera la presencia real de Jesucristo en el pan y el vino que se consagra durante la Santa Misa.
La Santa Misa se celebró en la Catedral de la Asunción ubicada en el Downtown de Louisville y fue oficiada por el Arzobispo de la ciudad, Monseñor, Shelton J Fabre.
Al respecto, el Arzobispo Shelton estuvo acompañado por un gran número de sacerdotes, diáconos y seminaristas. De igual manera, a la Catedral asistieron feligreses provenientes de distintas parroquias que conforman la Arquidiócesis.
La solemnidad del Corpus Christi, recuerda que la Iglesia no solo celebra la Eucaristía, sino que también anuncia públicamente que el Sacrificio de Cristo, es por la salvación de todas las personas del mundo entero.
La presencia de Cristo a través del pan y el vino, ocurre gracias a un cambio que la Iglesia llama transubstanciación, es justamente en el momento en que el sacerdote, durante la Consagración en la Misa, dice las palabras que el mismo Cristo pronunció sobre el pan y el vino: “Este es Mi Cuerpo”, “Esta es Mi Sangre”, “Hagan esto en memoria Mía”.
La Eucaristía está estrechamente vinculada con todos los misterios, sin embargo, tiene un significado especial y es el Amor de Jesús. La Eucaristía nos revela que el que coma de este pan vivirá para siempre.